Los protagonistas de "Los Repobladores" encontraron su oportunidad sin tener que vivir en la ciudad. Salvador dejó ladrillos y cemento por cerezos en flor en su pueblo malagueño de Alfarnate. A Fátima, enóloga, el amor la llevó hasta Montilla (Córdoba). Y Rogelio decidió volver a su pueblo de Beas de Segura (Jaén), cambiando el trabajo como gerente de una inmobiliaria por los campos de olivos.