Basi, consultora, retornó a su pueblo sevillano de Peñaflor tras vivir diez años en Italia. Está restaurando una antigua casa-palacio que será el primer hotel-boutique de la localidad. Juan Antonio se marchó a Londres en plena crisis económica y regresó a Montoro (Córdoba) para trabajar de apicultor en la empresa familiar. Y Paloma, que vivió más de 20 años en Bélgica, decidió instalarse en Cortelazor (Huelva) donde tiene una empresa de depuración ecológica de aguas.