Algo tan simple como un color ha marcado de siempre el género al que, supuestamente, iba destinado un juguete. Afortunadamente las cosas van cambiando y la niña maravillosa Ana, como puedes ver aquí, lo tiene muy claro. No os perdáis la reacción que tuvo cuando le decían a un niño que tenía que jugar con cosas de niños y las niñas jugar con cosas de niñas.